El amor propio en tiempos de fealdad

El amor propio es cuánto y cómo amamos a aquella persona que habitamos, con la que dormimos y nos despertamos. Podemos sentirlo en la manera en que nos hablamos a nosotros mismos, en cómo nos cuidamos o nos acompañamos en momentos difíciles, y en cómo perdonamos y reparamos nuestros errores. Amor propio es libertad para ser quién soy.
El amor propio, o lo que comúnmente llamamos autoestima, es por lejos el tema central de toda psicoterapia. Todo sufrimiento puede leerse en términos de qué tan resuelta está esa batalla interior, a la que todos los seres humanos somos arrojados en la existencia. El camino de reconciliación, donde aprendemos a amarnos a nosotros mismos, se construye con conocimiento de sí. No sólo desde una mente analítica, sino desde la mirada tibia de un corazón que ha sanado y que puede reconocer su esplendor.
Hoy vivimos tiempos donde abundan las imágenes sin contenido, cuerpos sin presencia; tiempos de apariencias, donde el éxito humano se mide en fama y dinero. Esto es a lo que yo llamo tiempos de fealdad.
De esta manera, nos preguntamos ¿cómo resulta la búsqueda de amor propio con estos referentes?… En una carrera agotadora de parecer esa imagen que proyecta éxito; con miles de seguidores en Instagram, con fotos consumiendo el producto cool, con la prenda de moda, etc. Sin tomar conciencia de que es en esa misma carrera, tras una imagen de lo que no soy, donde pierdo mi brillo y mi capacidad de amar lo que soy.
Si acaso comprendiéramos que es nuestra propia unicidad lo que nos hace bellos, no pelearíamos tanto con nuestra historia, nuestras imperfecciones y gustos. Sino, al contrario:  apreciaríamos aquello que nos hace únicos y, por lo tanto, hermosos.
Entonces, ¿cómo amarnos en tiempos de fealdad?: Conociéndonos a nosotros mismos.
Despertando la mirada interna para educarnos sobre quiénes somos. Ya que, es en la medida en que nos conocemos que podemos amarnos. Y a su vez, liberarnos de la necesidad compulsiva de ser reconocidos por otros. Aquí ya no hay necesidad de parecer, aquí nos permitimos ser. Y es justamente en esa coherencia y autenticidad donde aparece toda nuestra belleza.
En la cabeza sabemos que sólo podemos ser amados en la medida en que nos amamos a nosotros mismos. El gran desafío del amor propio es ¿cómo llevamos esta idea de la mente al corazón?

Natalia Barahona
Directora Fundadora de Rasavant y psicóloga clínica de orientación humanista transpersonal. Cursos de Metafísica, Flores de Bach, Psicología Transpersonal y Meditación Kriya, entre otros. Certificada como Focusing Trainer por el Instituto Focusing Chile, diplomado en Mística Islámica en el Centro de Estudios Árabes de la Universidad de Chile.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Ir arriba